viernes, 27 de mayo de 2011

Las rutinas de los niños III. El aseo.

Aviso, no voy a hablar de la retirada del pañal, esa parte del aseo merece una entrada completa.

El baño, el lavado de manos y cara, el cepillado de dientes... las diferentes rutinas higiénicas que en casa seguimos son el tema de hoy.
Es importante, desde mi punto de vista, trabajar con las peques las rutinas de aseo para que se sientan cómodas y porque se evitan enfermedades.

Dulçura se levanta directa al baño, recuerdo de cuando le quitamos el pañal y por la mañana íbamos corriendo no fuera que tras toda la noche sin problemas se liara justo al levantarse.
Tras el desayuno nos lavamos, también los dientes, y nos peinamos.
Antes de empezar a poner la mesa lavado de manos y después de comer visita al señor Roca para ir a dormir la siesta. Aunque ella quiere limpiarse sola, y de hecho en el cole lo hace, en casa sigo repasando yo, o quien la acompañe al baño, para evitar infecciones.
El baño es uno de los momentos preferidos del día, lo pasan genial. El otro día, por primera vez en su vida, no quería bañarse, pero existía un motivo. Llevaba una tirita de Hello Kitty y no se la quería quitar para bañarse. 
Tras el compromiso de volver a colocar una tirita tras el baño, encantada.
Antes de cenar lavamos las manos y después los dientes, con pasta y a fondo. También hacemos un pipí antes de ir a la cama.

Para conseguir que todas estas rutinas estén interiorizadas hemos sido constantes en su realización. 
Al principio, antes de iniciarlas, hemos hecho de modelo: nos ha visto lavarnos, peinarnos... Ahora lo hacemos con la peque, para que se vaya familiarizando.
Después hemos intentado que se fijara en cómo la peinábamos o le lavábamos los dientes... para que poco a poco descubriera los pasos a seguir. En función de la complejidad de la rutina ha empezado a hacerlo sola o hemos modelado sus movimientos, retirando poco a poco las ayudas. Y, desde luego, siempre hemos reforzado sus progresos por pequeños que fueran.

Ahora es casi autónoma en el aseo (excepto el baño, por el peligro que conlleva) y está encantada de hacerlo tan bien.

2 comentarios:

Gracitata dijo...

Me parece muy importante lo que dices, que para que interioricen estas rutinas primero haceis de modelos, y es que a veces pedimos y exigimos a nuestros hijos cosas que nosotros no hacemos, el típico "haz lo que yo diga pero no lo que yo haga" y si no lo hacen no podemos quejarnos, pero así tendrán un ejemplo claro de lo que tienen que hacer y seguro pronto lo aprenden. Un besito, gracias por pasarte por mi blog, yo ya te sigo :)

Marta dijo...

Gracitata, gracias a tí